viernes, 16 de octubre de 2015

CAMINO DEL SALVADOR Y

CAMINO PRIMITIVO

"EL CAMINO DE LA PROVIDENCIA"

                                    PROLOGO
Es mi quinta peregrinación a santiago y aunque este proyecto empecé a orquestarlo en 2013 no ha podido ser realidad hasta este año gracias a la motivación de mi mujer y el poderlo cuadrar con mis obligaciones laborales.
El titular este relato "el camino de la providencia" tendrá su explicación a lo largo de todo lo acontecido en el viaje, desde la preparación hasta el regreso a casa.
Esta vez volvería a hacerlo en  solitario, igual que en 2008 y aunque coincidiría con el trazado del primitivo el inicio iba a ser distinto.
Recordando lo poco preparado que fui en el camino del norte, lo que acarreó que sufriera más de la cuenta, esta vez he intentado ir lo mejor entrenado posible y con el poco tiempo libre disponible que tenía me planteé entrenar con bicicleta de carretera alternando con la de montaña para no perder la técnica.
El resultado fué el esperado, y superado con creces, ya que terminé el camino habiéndolo disfrutado y sin pasar por el agotamiento extremo, aunque algún dia se superó un ascenso acumulado de mas de 2100m.
Empezaron las dudas que te entran en los preparativos, como ¿que transportín llevar?, ¿tienda de campaña?, piezas de recambio,etc.
En un principio opté por un transportín a la tija, que después de hacerle unos acoples el año pasado para poder colocarle unas alforjas, no me pareció lo bastante fiable para el peso que debía transportar.
Como la bicicleta que iba a llevarme es mi habitual de doble suspensión me encontraba con el problema de adaptar el transportín que ya tenía al sistema de suspensión ya que no quería comprarme otro.Analizando varias ideas y despues de un par de prototipos llegué al montaje definitivo y que con un par de salidas de prueva superó el test

  La posterior duda que se me planteaba era si llevaba tienda de campaña o no.
En el camino del norte tuve muchos problemas para dormir, en parte debido a las pocas infraestructuras, cosa que comparte el primitivo, y a la mayor concurrencia de estos en los últimos años.
Al final opté por jugármela pensando en ir con el menor peso posible.
Con la bicicleta desmontada dentro de la caja con las alforjas y el máximo de equipaje que pude meter dentro procedo a enviarlo por una empresa de mensajería dos dias antes de partir hacia León.
El primer problema me lo encuentro que la persona que lleva la tramitación de los envios estaba de vacaciones y su sustituto no sabía como tramitar el envio.Acordamos que realizaria el envio esa misma tarde y que al dia siguiente pasara para pagarle.Cual fue mi sorpresa que cuando volví al dia siguiente la caja no la había enviado.Tuve una bronca mayúscula por su incompetencia y despues de hablar con el jefe me aseguró que la bici estaría en León al dia siguiente sin ningún recargo en la tarifa.

  
  

domingo, 24 de febrero de 2013

NOVENA ETAPA SOBRADO DOS MONXES-SANTIAGO

21 de agosto de 2012
67 km horas ???
fin del camino

Aunque cerraban las puertas a las 10 de la noche con apagón de luces incluido, fuera en el claustro la gente seguía de tertulia y algunos de botellón. Supongo que era por la proximidad de Santiago.
He dormido de fábula, es la primera noche que necesito dormir dentro del saco porque tenía frío. A las 7 toca diana y como lo teníamos todo preparado salimos pronto. Ha amanecido con mucha niebla y pronto empieza una fina lluvia.
niebla sobre Sobrado
 Vamos a desayunar y llamo a un albergue privado de Santiago para reservar plaza y me dicen que tienen disponibles. Con la tranquilidad que da el tener sitio para dormir nos cogemos la etapa con tranquilidad ya que es la última y queremos disfrutarla.
Nos ponemos la ropa de agua y salimos, las flechas nos indican que tenemos que subir por una fuerte cuesta,¡ pos a subir que otra más no importa!.
Llegamos arriba  y estamos heladitos, ahora toca bajar y la sorpresa es que hemos dado una vuelta de cojones para volver a salir a la carretera, resignación y a continuar.
Después de una hora más o menos deja de llover y empieza a verse el sol por lo que paramos a quitarnos los chubasqueros para no achicharrarnos.
Nos volvemos a encontrar con las catalanas, ya que hemos sido casi los últimos en salir del albergue y ellas ya llevaban varias horas caminando. Esta vez nos despedimos con la certeza de no volver a encontrarnos ya que a ellas aún les quedaban dos etapas.
Alternando caminos de asfalto con los de tierra llegamos a Arzua sobre las 10,30. La previsión inicial de ayer era llegar hasta aquí para que nos quedaran menos km. para hoy, pero como nos sobraba un día al descartar la opción de ir a Finisterre, hicimos bien en quedarnos en Sobrado.
Paramos a almorzar en el mismo bar en el que desayuné en 2008 y nos metemos un super bocata con su respectiva birra.
hay hambre ¿eh?

cuidado con los dedos
 Había una mesa al lado con unos vejetes(recién jubilados) que iban con una bicis de pedaleo asistido( motor eléctrico). Nos hizo gracia y entablamos conversación con ellos. Decían que evitaban en la medida posible el meterse por caminos de tierra porque ya eran mayores y las bicis no eran muy manejables por lo que pesaban.
Nos despedimos y emprendemos la marcha con la confianza que te da ir por terreno conocido.
Cuanta gente, esto parecía una romería. Recuerdo la misma sensación en los caminos que he hecho al enlazar con el francés.Pasas de no ver a casi nadie a ir tocando el timbre cada diez segundos. Todo el mundo va contento, se nota la cercanía de Santiago, unos van realmente destrozados y otros parece que están de excursión llevando únicamente una botellita de agua.
Ahora el camino va casi todo por pistas de tierra entre bosques de eucaliptos y el terreno es realmente rompepiernas, no hay cuestas kilométricas  pero sí repechos con mucho desnivel y prácticamente no hay terreno llano, o subes o bajas.
bosques de robles
 Vamos pasando por lugares que reconozco inmediatamente, saludando a todo el mundo y casi sin darnos cuenta llegamos al monolito que nos indica que hemos llegado al municipio de Santiago.Nos hacemos unas fotos para dejar constancia de ello y proseguimos la marcha.En un momento nos encontramos en la explanada de la televisión gallega. Apretamos todo lo que podemos y al pasar a los peregrinos algunos de ellos nos animan, en muchos momentos superábamos los 40 km/h.


Llegamos al monumento del papa Juan Pablo y vemos a los vejetes de las híbridas que ya habían llegado, les comento que aquello no es propiamente el Monte do Gozo y que si quieren verlo que nos acompañen.
Llegamos a las estatuas de los peregrinos señalando la catedral y vemos que se encuentran rodeadas de unas feas vallas .
  Dejamos a los vejetes y volvemos tras nuestros pasos hasta la pequeña ermita donde reanudamos el trayecto, el descenso es vertiginoso y en un momento llegamos al puente de entrada a Santiago.Como ya conozco el camino no perdemos tiempo buscando las indicaciones y entramos al casco antiguo por la porta do camiño.Algunos tramos los tenemos que hacer a pie debido a la gran afluencia de peatones y ya empezamos a oir al gaiteiro de la catedral.
Entramos en la plaza del obradoiro a través de la escalinata y nos dirigimos al fondo dando la espalda a la catedral para darnos la vuelta y verla en todo su esplendor.
Esta vez no tengo la misma emoción que he tenido en ocasiones anteriores, será porque me estoy habituando o bien porque en este camino no he sufrido tanto como en los anteriores.
Nuestro periplo termina a las 15 horas con cerca de 660 km. recorridos.
lo conseguimos
panoramica de la paza del obradoiro
   Después del ritual de fotos tocaba buscar el albergue y tras llamar por teléfono nos dicen que está a la entrada de Santiago.Maldigo un poco la estampa y a recorrer hacia atrás 2,5 km.
El albergue es de 2010 por lo que está nuevo aunque se trata de la planta baja de un edificio.Cogemos nuestras camas y antes de acomodarnos preguntamos en recepción donde podíamos comer ya que eran casi las 4 de la tarde. Nos indica el restaurante del hotel que había al lado y que nos darían de comer sin ningún problema.
La comida abundante y con buena calidad, y con el estomago satisfecho y una buena ducha  nos echamos una cabezadita, que nos la habíamos ganado.
Por la tarde nos dirigimos a la oficina del peregrino a recoger la compostela y a hacer un poco de turismo.



 Esta noche toca cena a la carta para celebrar el fin del camino y pese a la gran oferta de locales no encontramos el que nos convenza. Al final lo echamos a suertes y entramos en uno en el que desentonábamos con nuestra indumentaria, pero ya estábamos dentro y si alguien se encontraba incómodo pués peor para él.
La cena, fantástica.El precio, razonable. La anécdota impagable.
Resultó que entablamos conversación con un matrimonio de la mesa de al lado y el tío tenía un restaurante en el que iban muchos famosos y era amigo personal de Andrés Pajares. Nos lo pasamos de miedo oyendo las historietas que nos contaba de las juergas que se montaban algunos personajes.(cosas que no salen en las revistas del corazón).Después de unos orujos por gentileza de la casa, nos fuimos medio doblados al albergue, aunque después de más de dos km. a pie ya habíamos hecho la digestión.
  


   


       

domingo, 27 de enero de 2013

OCTAVA ETAPA VILALBA - SOBRADO DOS MONXES

20 de agosto de 2012
63 km 4 horas pedaleando
tocamos el techo del camino.

Hoy si que hemos dormido de fábula.Después de hacernos los remolones en la cama nos levantamos y lo recogemos todo. Bajamos al bar del hostal para desayunar el croisant más grande que he visto nunca regado con un café con leche. Pagamos la cuenta y vamos a recoger la ropa que tendimos ayer y nos encontramos que está toda mojada, por lo que decidimos tenderla sobre las alforjas atada a los pulpos de goma. Vaya espectáculo de tenderete.
Salimos a las 9 pero hoy nos lo íbamos a coger con calma ya que a priori la etapa no era excesivamente larga aunque en su parte final tiene más de 15 km. de subida.
Salimos sin ninguna complicación y a los pocos km. atravesamos un núcleo de casas abandonado que causa una extraña sensación. Hacemos unas cuantas fotos y proseguimos.
horreo abandonado
poblado en ruinas
 Continuamos por pistas entre bosques y tenemos que parar a cubrir la ropa ya que empezaba a chispear. Salimos a la nacional y nos encontramos con un cementerio neogótico con una iglesia al lado y nos cuesta encontrar las flechas aunque rápidamente nos volvemos a situar en la dirección correcta. Advertimos a un grupo de niños con sus monitores que no iban en la dirección correcta aunque nos ignoran, me sabía mal por los niños pero no podíamos hacer más.
cementerio neogótico
 A unos cien metros del cementerio volvemos a cruzar la nacional para internarnos en un camino de tierra. Los caminos se van sucediendo aunque están bien señalizados hasta que en un caserío una mujer nos grita diciéndonos que nos habíamos pasado el cruce, tras volver sobre nuestros pasos unos cuantos metros, bajamos por un tramo pedregoso que se convertía en senda por el que desembocamos nuevamente en la nacional.
 Justo al lado hay un bar en el que paramos a hacernos un café y calentarnos un poco ya que hace un poco de fresco. Nos encontramos con un número elevado de peregrinos que han decidido parar a almorzar por lo que la parada se alarga un poco.
Poco antes del mediodía llegamos a Baamonde y decidimos comprar provisiones en un super para que nos pase lo de siempre.
Seguimos la nacional que apenas tiene tráfico después de unos 4 km. nos desviamos a la izquierda y cruzamos un puente. Llegamos a una especie de zona recreativa donde hay una fuente, un crucero y una ermita, la capela de San Alberte. Decidimos parar a hacernos un bocata en un lugar tan impresionante.
 Cuando terminamos de comer recogemos todo y continuamos por una senda con una fuerte subida que hace que tengamos que subirla a pié, la guia recomienda a los ciclistas que cojan el desvío.
Continuamos entre bosques de robles y alternando pistas de tierra con pistas asfaltadas.
Al pasar por la terraza de un bar nos llevamos la sorpresa del día, nos encontramos con las catalanas tomando  un café, lo primero que me vino a la boca fue llamarlas tramposas y nos explicaron que al llegar al albergue no habían plazas e hicieron autostop para ir a otro albergue. Su explicación no me convenció mucho ya que habían adelantado más de tres etapas. Nos despedimos y quedamos en vernos en el monasterio de Sobrado.
Iniciábamos la subida más larga del camino con cerca de 20 km. de subida aunque con un desnivel contenido. Seguimos alternando tramos de asfalto con otros de tierra y con algún sendero hasta que coronamos el punto más alto del camino del norte, 710 m. 
Iniciamos el descenso y en el primer bar que vemos paramos a hacernos una cervecita fresca para combatir el calor infernal e hidratarnos debidamente.
Reanudamos la marcha más animados y en poco tiempo llegamos al monasterio de Sobrado, aunque debido a la hora que es está cerrado por lo que vamos al pueblo a comer de menú. 
Después de comer , (todo estaba muy rico), volvemos al monasterio y ya nos asignan una litera en una de las dependencias del claustro.
Es algo impresionante el poder pernoctar en un edificio con tanta historia.
Después de la ducha hacemos una lavadora y una secadora y mientras uno vigila la ropa el otro visita el monasterio.No puedo describir lo que vi, solo puedo decir que es algo increible.
claustro del peregrino
   
  Decidí que iría al oficio de la tarde, ya que tenía conocimiento que la misa era cantada. A la hora indicada subí a la primera planta y entré en una sala que había sido remodelada hace poco.
Entraron los  frailes y empezaron a cantar, entre el cansancio acumulado y los cantos empezaba a dormirme, el calor empezaba ha hacerse insoportable por lo que tuve que abandonar la sala antes que terminaran los oficios. Viendo la hora que era y como ya habíamos comido de menú decidimos acercarnos al super y comprar víveres para cenar en el comedor.
Después de cenar conversamos un rato con las catalanas y nos despedimos de ellas ya que nosotros al día siguiente llegaríamos a Santiago.  
 

 
   

viernes, 4 de enero de 2013

SEPTIMA ETAPA VILELA-VILALBA

19 de agosto de 2012
72 km 6 horas pedaleando
¡¡¡ Abandonamos el mar.Ya estamos en Galicia. !!!


Esta noche he vuelto a dormir fatal.Entre el jaleo que armaron los que llegaron anoche y los mosquitos me he pasado media noche en vela.
Amanece un  día espléndido y tras tomarnos un café con leche y magdalenas en el bar iniciamos la marcha a las 8,30 en una mañana más fresquita de lo habitual.La salida es como siempre en ascenso, por lo que pronto empieza a sobrarnos ropa.Llegamos a Ponte de Arante y decidimos coger la alternativa para bicicletas que aunque da más vuelta no tiene una pendiente tan fuerte. Vimos a las catalanas en Villamartín Grande y nos paramos un momento a llenar los bidones y nos dijeron que se quedaban en el albergue de Gondán, nos despedimos e iniciamos un fuerte descenso por la carretera.
fuertes rampas y fuerte calor
subida entres bosques de eucaliptus
 Pasamos por varios núcleos urbanos siguiendo con fuertes desniveles tanto subiendo como bajando hasta llegar a Lourenzá donde paramos a hacernos un bocata. Cuando aparcamos las bicis decidimos atarlas aunque las teníamos a la vista ya que había un pinta merodeando por la zona con apariencia de tener malas intenciones. Le preguntamos al camarero si lo conocía y dijo que estaba así por las secuelas de las drogas.
Trás más de una hora reanudamos la marcha. La subida es infernal, salva 200m en menos de 2 km., se nos salía la tortilla por las orejas.  Pasamos por la aldea de Grove donde la imagen curiosa es que el camino pasa por debajo de una casa, de la cual hacemos varias fotos.

Llegamos a Mondoñedo hacia el mediodia y nos encontramos con un mercado en la plaza. Al ser domingo la gente iba como un pincel y ahí estábamos nosotros dando el cante paseando por el mercado.
Llenamos los bidones en una fuente-monumento y volvemos a la marcha. Continuamos ascendiendo por carretera local con un calor infernal aunque tenemos la suerte que como vamos entre bosques hay bastantes sombras.
fuente de Mondoñedo
 Cuando pasamos Lousada tomamos la decisión de ignorar la alternativa para bicicletas que indica la guia y seguimos el trazado del camino, lo que nos lleva por un paisaje fantástico pero por unas cuestas infernales. Tras un corto pero intenso descenso hasta un arroyo empezamos a subir, nos encontramos con las ruinas de algo que  parecía haber sido un molino ( luego sabré que se trataba de una vieja fábrica de mármol ) si en lugar de hacer sol hubiese niebla parecería que habían hasta fantasmas. Las rampas se hacen durísimas ya que muchas superan el 20% y aunque no ponemos pie en el suelo paramos un par de veces a coger aire ya que daba la sensación que nos acabábamos el de toda la montaña.
Llegamos al alto extenuados y donde antes debía haber un paisaje fantástico nos encontramos de frente con el talud de la autovia.

Llegamos a Gontán y comemos en un bar que hay en la plaza.Vemos comiendo a los viejos vascos que vimos en el albergue de Vilela y nos dicen que han seguido el camino (¿y han llegado antes que nosotros?) aunque no sabían que los habíamos visto pasar por la nacional, supongo que se trata del orgullo del ciclista.
Después de comer preguntamos por el albergue y nos dicen que está lleno (¡ vaya sorpresa !) aunque el ayuntamiento ha habilitado plazas en el polideportivo.  
Nos dirigimos a Abadín que es donde se encuentran las instalaciones deportivas y tras observar el estado precario en el que se encontraba decidimos continuar (hasta los contenedores de basura estaban dentro.¡¡asqueroso!!).
Aunque estábamos bastante cansados y hacía mucho calor nos lo tomamos con animo ya que el paisaje lo hacía ameno.Llegamos a la iglesia de Santa María que según consta es del siglo XII.
iglesia de Santa María y su cruceiro
Un desvió por obras nos hace dar un importante rodeo.En un tramo de la nacional coincidimos con los murcianos (tirando de nacional si que se avanza) que nos pasan y ya no los volvemos a ver.A los que si vimos fue a los vascos tirando de nacional (con que siempre por el camino,¿eh?).
Volvemos a recuperar el trazado original y vuelven a comenzar los fuertes desniveles (por la nacional eso no pasa) .Vamos alternando pistas asfaltadas con tramos de tierra. Cruzamos el río Batán por un puente del S. XVII y en el que hay unos bancos y unas mesas donde nos paramos a descansar un rato y hacer algunas fotos. Estamos ya bastante tocados fisicamente y a mí, desde las rampas de Mondoñedo, me duele bastante la rodilla.
puente de Pontevella
 Proseguimos la marcha y seguimos alternando tramos de tierra con asfalto por caminos rurales. Hasta Vilalba no hay ningún desnivel importante por lo que rodamos bastante rápido. Nos encontramos con un solitario crucero en un campo que me llama la atención. Llegamos a Goiriz y vemos que ya nos quedan menos de 5 Km para llegar al albergue y solo hemos pasado a dos caminantes por lo que si hay plazas libres tendremos sitio.
crucero solitario antes de Goiriz
 Llegamos al albergue y solo queda una plaza libre pero nos dicen que han habilitado el polideportivo. La idea de dormir en el suelo no nos convence y buscamos en el pueblo un hostal recomendado por un chico de protección civil. Nos llevamos la sorpresa que es de reciente construcción y aunque no es el más barato del pueblo dispone de garage para guardar las bicis.
albergue de Vilalba
 Hacemos la colada dentro de la ducha mientras nos duchamos y tendemos la ropa en un almacén donde guardan algunas mesas y sillas poniendo las cuerdas de tender entre las dos bicis. Menudo cachondeo cuando del peso de la ropa cayeron las bicis junto con la ropa mojada al suelo, todo el trabajo " pa ná".
Fuimos a dar una vuelta por el pueblo después de hacernos una birra fresquita en el bar del hostal y cenamos unas raciones de pulpo con ribeiro en un bar de la misma calle.Esta noche dormiremos de lujo.
iglesia de Santa María

Torre de los Andrade (siglo XV)